#1-Desafiando tus límites: Creencias limitantes en nuestros objetivos

Empezamos el año y con él muchas nuevas metas pero, ¿hasta qué punto los objetivos que te estas marcando son los que quieres alcanzar? A pesar de que en el camino del emprendimiento intentamos derribar todos los días esas creencias limitativas, igual logran a veces esconderse un poco detrás de esas nuevas metas del nuevo año.

Vale, pero es importante saber identificar esas creencias limitantes que se inmiscuyen en nuestros planes sin darnos cuenta, pues pueden venir en forma de opiniones o pensamientos que creemos que son ciertos y permitimos que nos condicionen. 

Acá te dejamos tres que seguramente no imaginabas pero son las más comunes: 

1- Para traer el pan a la casa debías tener una profesión: Si, es que a veces ni siquiera suenan mal,  puede ser algo que nos inculcó un familiar, como el tema de que para poder llevar el pan a la casa debemos graduarnos de algo importante como Ingeniero, Abogado o Médico, por que si no, no vamos a poder conseguir un trabajo estable en el cual quedarnos hasta nuestra jubilación.

 2- No tengo tiempo: A ver, es que quien no ha tenido esos pensamientos de “Si emprendo no tendré tiempo”, “Tengo que trabajar 10 horas al día ya que solo depende de mí” , Todo es cuestión de planificación, porque quizá al inicio estos panoramas si se vuelvan un poco reales, pero la respuesta está en el mismo tiempo, no significa que no se pueda lograr salir de ahí a mediano o largo plazo, no es imposible. 

Esto nos deja con la última pero más escuchada, 

3- Es que nadie lo va a hacer como Yo: Muchas veces nos limitamos a delegar porque sentimos que nadie hará el trabajo como nosotros mismos, preferimos no tomar esta responsabilidad de contratar nuevas personas. Al final no es lo mismo tener miedo a limitarse. Las personas valientes son aquellas que se atreven a hacer algo que les da miedo. Y hasta para marcar nuestros objetivos debemos ser valientes, plantearnos si de verdad nos atrevemos a compartir nuestro sueño con personas que puedan ayudarnos a lograrlo.

Nunca olvides que “Si lo crees, lo creas”. Tienes todo lo que necesitas para que puedas ir donde quieres ir. 

Con esto les invito a preguntarse a sí mismos, ¿Cuál es mi objetivo real? ¿Cuál es el punto al que realmente quiero llegar? Y quiero aclarar que el punto de todo esto no es que a partir de mañana sean super estrictos con ustedes mismos, pero recuerden que un barco sin rumbo no llega nunca a su destino. Si quieres llegar a ese destino, tienes que tenerlo en tu mente, crearlo en tu mente y creerlo en tu corazón. Porque tarde o temprano, llegarás ahí. Si no te lo planteas y no te das la oportunidad a ti mismo y a la vida de poder llegar ahí, nunca llegarás, solo porque tú mismo te pusiste ese límite,  y la última pregunta que deben hacerse es, ¿qué haría si no tuviera miedo?.

Episodios de podcast que se mencionan:

¡No olvides suscribirte en nuestra newsletter para que recibas todas nuestros tips, trucos, reflexiones, y mucho amor y valor!